lunes, 3 de octubre de 2011
El Cantar de los Cantares (11)
C. UNA INVITACIÓN DE LA AMADA (7:11-13)
Aquí ella toma la iniciativa en el juego amoroso. Usa la imagen de la primavera para decir que su amor continúa tan fresco como siempre. “Mandrágoras”, frutas parecidas a las manzanas con supuestos poderes afrodisíacos (Gn. 30:14-16).
D. EL DESEO DE LA AMADA POR UNA INTIMIDAD MAYOR (8:1-4)
En el Antiguo Cercano Oriente las expresiones públicas de amor sólo eran bien vistas entre parientes. Ella deseaba que él le mostrara su amor todo el tiempo. Vv. 2-4: Ella, jugando, se pone el papel de hermana mayor o incluso en el de madre. El punto es que el afecto de ella hacia él va más allá de lo puramente erótico. Lo ama como a un pariente y a un amigo.
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