martes, 12 de junio de 2012

¿Qué es el matrimonio?


La Biblia habla alto y claro acerca de la relación matrimonial por cuanto esto es un invento de Dios, y no como muchos parecen creer, un invento humano. Si queremos saber lo que es en realidad el matrimonio debemos acudir a la Biblia y no dejarnos guiar por nuestros propios conceptos, o por algún otro criterio puramente  humano. Fue Dios quien diseñó el matrimonio, y lo hizo con un propósito y por una razón. Es a Él a quien debemos preguntar. Entonces ¿qué es el matrimonio? Primero quisiéramos dejar sentado qué no es, para después explicar bíblicamente lo que es.

Para la mayoría de las personas hoy día el matrimonio se reduce a la cópula legalizada, y ciertamente el acto sexual y el placer que produce estaban contemplados por el Creador para que formara parte de ésta relación, y de hecho es el único espacio permitido para que se produzca. Pero no es su principal propósito, porque si lo fuera, el matrimonio no tendría sentido.

En otros tiempos y otras culturas el matrimonio ha sido reducido al simple apareamiento. Bueno sólo para la procreación y crianza de los hijos. También Dios tenía eso previsto para el matrimonio y también es el único marco apropiado para ello. Sin embargo no es su propósito primario, porque si el crecimiento demográfico fuera lo primario, el matrimonio sería una limitante.

En su infinita sabiduría el Creador combinó ambas cosas. Si el acto de engendrar  fuera como una jaqueca o simplemente algo insípido, probablemente  Adán y Eva se hubieran quedado sólo con Caín. Así que concluimos que buscar el placer sexual y la tenencia de hijos dentro del matrimonio es muy válido, pero no debemos sobreestimarlos como si fueran lo más importante o un fin en sí mismo.

Ya hemos visto lo que no es el matrimonio. Ahora veamos lo que es. Y ¿qué es? Es un pacto. Que se hace entre un hombre y una mujer delante de Dios y conforme  a la ley y la cultura de cada pueblo. Y es un pacto para estar juntos y ofrecerse mutua compañía durante toda la vida de ambos. Veamos lo que consideró Dios para establecer el matrimonio. Génesis 2: 18 registra que: Jehová Dios dijo: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él. Así que la razón que Dios consideró para establecer el matrimonio fue la soledad de Adán, y no su necesidad  sexual o la carencia de hijos. En consecuencia creó a la mujer como ayuda idónea y compañía permanente mientras ambos viviesen. De esta manera el matrimonio descansa sobre un pacto de compañía y no sobre otra consideración secundaria.

Si asumimos el matrimonio como lo que es verdaderamente, pienso    que quizás habría menos divorcios; y la sociedad estaría más fortalecida para  enfrentar los desafíos de la posmodernidad.

www.ObreroFiel.com – Se permite reproducir este material siempre y cuando no se venda.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Trabajo en casa